BIOFEED B es una combinación de bacterias benéficas y anticuerpos de origen natural empleado en porcinos y bovinos; diseñado para proveer a los animales de una adecuada microflora y anticuerpos específicos contra patógenos de mayor predominancia en cada especie animal.
Desarrollo de la inmunidad en el ternero recién nacido.
Debido a la relación materno – fetal (Placenta sindesmocorial) que impide el paso transplacentario de anticuerpos desde la madre al feto, se considera al ternero agamaglobulinémico al momento del nacimiento, lo que lo hace altamente susceptible a las infecciones por patógenos ambientales (Leyán. 1994).
Las inmunoglobulinas circulantes son necesarias para evitar las septicemias en los terneros, sin embargo no siempre previenen la aparición de diarreas,
probablemente porque no son capaces de alcanzar los niveles necesarios en el lumen intestinal.
Además el calostro proporciona inmunoglobulinas séricas que previenen o reducen otras infecciones bacterianas y al mismo tiempo el calostro puede saturar
el sistema de transporte macromolecular del intestino, proporcionando así protección frente a los agentes patógenos invasores (Jhonstone et al., 1977;
Acres, 1985).
Síndrome entérico neonatal bovino:
Enfermedad causada por múltiples causas y representa uno de los problemas sanitarios de mayor relevancia en los primeros días de vida, siendo además una
importante causa de mortalidad. Produce significativas pérdidas económicas en la ganadería y afecta a los sistemas productivos intensivos, pudiendo
observarse hasta un 70% de mortalidad, siendo el principal signo la diarrea.
La presencia de diarrea neonatal se debe fundamentalmente a la falta de inmunidad pasiva a través del calostro.
Factores predisponentes:
· La carga de agentes infecciosos en el medio ambiente (por movimiento de terneras e higiene en general).
· Factores nutricionales: sobrealimentación, sustituto lácteo de mala calidad, limpieza inadecuada, cambios repentinos en la dieta, utilización de leche fermentada mal conservada o preparada.
· Estrés: clima, traslado, etc.
Problemas de manejo (horarios de administración de alimento, temperatura de la leche o sustituto, forma de alimentación, número de tomas diarias, toma de
calostro, cambios repentinos en la dieta, etc.
Otros factores a tomar en cuenta:
1. Estimulación de la pérdida pasiva de agua (Salmonellas, BVD) o por aumento de la presión osmótica en el intestino por deficiencia de lactasa (rotavirus, coronavirus), o por formación de sustancias osmóticamente activas o la administración errónea de sacarosa.
2. Secreción activa sobre la luz intestinal (Colibacilosis).
3. Disminución en la absorción (síndrome de mala – absorción).
Agentes patógenos causales:
Escherichia coli.
Desencadena diarreas típicas en animales de 3 días de edad. La transmisión es fundamentalmente fecal – oral, siendo los animales infectados la fuente de infección más importante.
Coloniza durante los primeros días (o las primeras horas de vida) el tracto intestinal de los animales y dependiendo del serotipo, serogrupo o virotipo de E.coli contaminante, la enfermedad serás más o menos importante. De cualquier forma siempre produce la destrucción de vellosidades intestinales y una alteración de los enterocitos ocasionando diarrea secretora, instaurándose una profusa diarrea líquida amarillenta que rápidamente desencadena la deshidratación que puede ser mortal.
Existe también debilidad y postración acabando con shock hipovolémico.
Puede derivar en:
1. Colisepticemia: la mayoría de los casos de colibacilosis septicémica suceden durante los primeros días de vida. Los terneros enfermos presentan fiebre y debilidad, frecuencia cardiaca y respiratoria elevadas y puede o no observarse diarrea. La colisepticemia es frecuente en terneros privados de calostro, dando como consecuencia la muerte rápida del animal por bacteremia. En algunos casos el curso de la enfermedad es más prolongado, y la bacteria puede localizarse en uno o más tejidos como articulaciones (poliartritis) y meninges (meningitis) produciendo importantes secuelas.
2. Enterotoxemia: caracterizada también por colapso y muerte rápida del ternero. Sin embargo, está asociada con la proliferación de ciertas cepas de Escherichia coli en el intestino, sin bacteremia. La muerte puede ser producto de toxemia.
3. Colibacilosis entérica. Es parte del síndrome diarréico. La muerte puede ocurrir o no dependiendo de la severidad de los desajustes fisiológicos.
Coronavirus y Rotavirus
Virus ampliamente distribuidos a nivel mundial. Se ha demostrado que existen animales portadores que pueden excretar el virus sin presentar sintomatología. La edad de mayor vulnerabilidad es cercana al periodo neonatal, siendo la transmisión feco – oral directamente, sea por heces o por agua y/o alimentos contaminados.
El rotavirus se aloja en el yeyuno e íleon, mientras que el coronarivus además en colon y recto. Existe destrucción de células apicales de las
microvellosidades intestinales. Al no digerirse los nutrientes de la leche hay un incremento de disacáridos en la luz intestinal, aumentando la presión
osmótica, absorbiendo el agua de los tejidos circundantes. Se provoca diarrea, hipovolemia y acidosis llegando en muchas ocasiones a un shock hipovolémico
y muerte.
La morbilidad por rotavirus puede llegar al 80% y mortalidad entre el 15 a 20% mientras que por coronavirus al 100% y con una mortalidad del 50% como máximo.
Enterotoxemias
Cuadro que se puede manifestar agudo o sub-agudo desatado por especies del género Clostridium. La afección más importante se produce por las toxinas del microorganismo a pesar de que exista una infección intestinal inicial. Ya que la bacteria esporulada se encuentra de forma habitual en el intestino de los bovinos.
La mortalidad está próxima al 90% ya que la toxina del C. perfringens necrosa tanto las células intestinales como las del Sistema Nervioso Central.
El cuadro clínico suele desencadenarse de forma muy rápida; ya sea con muerte súbita o bien con anorexia, hipertermia, decúbito, diarrea hemorrágica y muerte después de convulsiones.
Salmonelosis
El género Salmonella en los bovinos tiene distintas manifestaciones, casi siempre agudas, desde procesos digestivos, pasando por septicemias, hasta cuadros respiratorios o genitales.
La más hallada es S. Typhimurium, ya que es la más inespecífica.
La infección oral es la más común y deben darse las condiciones idóneas intraintestinales para que la bacteria pueda instaurarse, es decir que debe de existir una disbiosis previa, pues tanto el peristaltismo como los ácidos volátiles presentes en el intestino lo impedirán.
La Salmonella también puede atravesar la lámina propia del intestino e invadir y diseminarse a los nódulos linfáticos y otros órganos ocasionando septicemia habitualmente fatal que acompaña a los signos de la diarrea como lo son moco, fibrina, sangre, además de la deshidratación del animal.
Coccidiosis
Asociada a brotes de diarrea neonatal. La ingestión de ooquistes de Cryptosporidium produce casi siempre la destrucción de la mucosa intestinal si las condiciones son favorables, sobre todo en torno a la salubridad deficiente y hacinamiento.
Composición de BIOFEED B:
Anticuerpos para: E. Coli K 99, Rotavirus Bovino tipo 6 y tipo 10, Coronavirus bovino, Salmonella Dublin, Salmonella Thyphimurium.
Probióticos: Lactobacillus acidophylus, Bifedobacterium longhum, Bifedobacterium thermophylum, Streptococcus faecium.
Modo de acción:
La mejor tecnología permite la producción de anticuerpos con receptores específicos en niveles capaces de combatir los patógenos más importantes que
invaden el tracto digestivo de los animales jóvenes. Estos anticuerpos pueden ser suministrados vía oral en los animales recién nacidos y asimilados de
manera inmediata ando lugar a la creación de inmunidad pasiva.
Todos los animales necesitan una cantidad mínima de bacterias benéficas (microflora) para absorber los nutrientes en el tracto intestinal, producir sustancias necesarias en la digestión normal y para su producción contra patógenos.
Los componentes de biofeed proporcionan al animal las bacterias benéficas para mantener una microflora equilibrada así como una concentración adecuada de anticuerpos naturales frente a patógenos predominantes. Estos anticuerpos, se unen a la membrana externa de los patógenos, previniendo que estos se adhieran a receptores intestinales situados en la superficie de la pared interna del intestino. Los anticuerpos, también impiden la proliferación de patógenos, siendo inhibidos y eliminados al exterior, evitándose la presentación de enfermedades.
Rangos de aplicación:
La aplicación es estrictamente por vía oral.
BIOFEED B.
Presentación:
Pasta en Jeringa por 10 gramos
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